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  • suareznora1995

Reto 2: ¿Qué elementos caracterizan el trabajo en alianza?

#INAP_ODS #Aprendizaje_ODS Para realizar la tarea 2, he escogido el nuevo Proyecto de Ley de Prevención de las Pérdidas y el Desperdicio Alimentario en el que el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha trabajado junto con distintas organizaciones (sector privado, consumidores y ONGs, distribución y canal HORECA, industria y sector primario) para lograr el objetivo común de evitar la pérdida de alimentos en toda la cadena alimentaria desde la granja a la mesa, integrado como una de las metas de la Agenda 2030.


Este proyecto de Ley se alinea con el ODS 12 de consumo y producción sostenible, en concreto, con la meta 12.3 en la que se establece para 2030, “reducir a la mitad el desperdicio mundial de alimentos per cápita en la venta al por menor y a nivel de los consumidores y reducir las pérdidas de alimentos en las cadenas de producción y distribución, incluidas las pérdidas posteriores a la cosecha”.

El propósito de este proyecto es regular por primera vez en España, el desperdicio alimentario y concienciar a la sociedad sobre dicho problema ya que pese haberse reducido, aún se tirada una alta cantidad de alimentos a la basura. Durante el año 2020, los hogares españoles tiraron a la basura un total de 1.365 millones de kilos de alimentos, lo que supone 31 kg por persona.


Los principios de actuación de este proyecto de Ley para garantizar su sostenibilidad en el tiempo son:

  • Obligatoriedad para los agentes de la cadena de disponer de un plan de prevención de las pérdidas y el desperdicio de forma que puedan identificar aquellas fases dentro de los procesos productivos donde pueda haber pérdidas y así, llevar a cabo medidas para minimizarlos o destinarlos a otros usos siguiendo la jerarquía de prioridades.

Cuando dichos alimentos se destinen a otros usos, la prioridad máxima será su donación o redistribución para consumo humano. Para ello, habrán de suscribirse convenios de colaboración con empresas, entidades y otras organizaciones sin ánimo de lucro o bancos de alimentos.


La segunda opción contemplada es la transformación de los alimentos, siempre que sean aptos para consumo humano o bien, en caso contrario, serán destinados a la alimentación animal y fabricación de piensos, uso como subproductos u obtención de biocombustibles.


  • Aplicación de medidas de buenas prácticas de reducción del desperdicio alimentario en todos los eslabones de la cadena, en especial en los establecimientos de venta al consumidor final para promover el consumo de productos de temporada, de proximidad o ecológicos.


Para finalizar, es fundamental la publicación y difusión de este proyecto de Ley a la sociedad civil ya que un elevado porcentaje de alimentos es tirado a la basura por los consumidores. En mi caso concreto y para ser útil en mi Administración, como inspectora de sanidad animal, tener más presente los tiempo de vida útil de los alimentos inspeccionados, evitar el desperdicio de alimentos no aptos destinándolos a otros usos autorizados, y transmitir dicho conocimiento a otros agentes con lo que trabajamos estrechamente.



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